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La medicina preventiva antiaging está de moda y no es para menos, ya que nos ayuda a prolongar nuestra vida desde dentro. El sector de la medicina estética lo tiene muy claro, parte del éxito de los tratamientos de medicina estética se basa en un buen protocolo de prevención que logre retrasar los signos de envejecimiento.

Gracias a los avances científicos que se han ido realizando al respecto existen revolucionarios programas antiaging que consiguen ralentizar el paso del tiempo. Los centros y clínicas de medicina estética van incorporando, cada vez más, especialistas tanto en esta rama como en nutrición y es que se ha investigado mucho en productos con capacidad regenerativa.

¿Qué es la medicina antiaging?

No cabe ninguna duda de que el envejecimiento es imparable, desde que nacemos comenzamos a envejecer, sin embargo, tenemos a nuestro alcance muchas herramientas que nos ayudan a ralentizar este proceso.  El objetivo es lograr que nuestro organismo se encuentre joven, fuerte y sano para poder vivir más tiempo en perfecto estado.

La misión de la medicina antiaging es conseguir retrasar el envejecimiento corporal y aumentar la longevidad del ser humano. ¿Cómo? Adquiriendo hábitos más saludables que aumenten nuestra calidad de vida. Y aquí es donde los tratamientos antiaging han demostrado que ayudan a ganar en bienestar y en años de vida.

Es importante saber que nuestra longevidad depende de dos factores:

· De nuestra carga genética, en un 25%.

· De nuestros hábitos, en un 75%.

La medicina antiaging estudia los factores y hábitos que perjudican al ser humano y producen un envejecimiento prematuro del organismo.

Puntos clave en la medicina antiaging

· Alimentación saludable, especialmente rica en nutrientes y antioxidantes y baja en calorías.

· La práctica de ejercicio físico.

· Relajación y eliminación de estrés.

· Terapias hormonales naturales.

Beneficios

La medicina antiaging y un estilo de vida saludable nos aporta múltiples beneficios, peo los más destacados son:

· Reducción de probabilidad de sufrir alguna patología del corazón.

· Aumento de energía y fuerza corporal.

· Una mejora de la libido.

· Un sistema inmunitario más saludable.

· Una piel más sana y un cuerpo libre de exceso de grasa.

· Una mejora de nuestro aspecto físico.

· Un buen estado las funciones cognitivas.

Esta tendencia ha llegado para quedarse, además, manteniendo unos hábitos saludables logramos que nuestros tratamientos de medicina estética tengan unos resultados más exitosos y perdurables en el tiempo.